Hallan vasijas mayas con más de mil 200 años de antigüedad en Yucatán

0
162

Arqueólogos del Instituto Nacional de Antropología e Historia de Yucatán, hallaron dos piezas mayas de relevancia histórica y con una antigüedad de mil 200 a mil 400 años.

“En general es de 600 a 800 d.C. conocido como el clásico tardío”, informó Sylviane Boucher, responsable del laboratorio del INAH en Yucatán.

La rareza de estas vasijas es que se sabe todo de ellas por las inscripciones que tienen alrededor y eso no es común en los hallazgos mayas.

Los investigadores descifraron que las vasijas son un estilo maya denominado “Chocholá”, tienen inscritos 11 cuadros de inscripciones jeroglíficas mayas que indican que perteneció a “El Cholom”, una persona de la élite maya dedicada a anunciar las órdenes del gobernante.

“Vemos que es una persona de élite, efectivamente de élite, pero no es un gobernante, es alguien que está subordinado al gobernante. Aquí tenemos escrito su cargo, el Sajal se ha propuesto que puede ser un exclamador, es decir, aquel que dice en voz alta los designios del gobernante hacia la comunidad”, informó Ricardo Canul, arqueólogo del INAH.

“Los sajales, los que estudian epigrafía, saben que son señores que son subordinados al gobernante supremo, del señor, del gran señor de Oxkintok”, agregó Sylyiane Boucher, responsable del laboratorio del INAH en Yucatán.

Este señor formó parte de la élite maya que sirvió como “Sajal” al gobernante de Oxkintok, una ciudad maya localizada a 75 kilómetros al Sur de Mérida y una de las más importantes de Yucatán.

“Es un título político, social, que indicaba un cierto status en la población, que no llegaba al poder de Gobernante, pero sí tenía cierto poder”, compartió Canul.

Los jeroglíficos revelaron para que sirvieron estas vasijas.

“Podemos ver U´lk, atole, este tipo de bebidas ha sido identificadas no solo en esta vasija, estilo Chocholá, si no, en otras vasijas”, concluyó Ricardo Canul, arqueólogo ceramista del INAH.

Debido a su importancia y rareza, las dos vasijas se encuentran resguardadas en laboratorios del INAH y posteriormente serán exhibidas en museos